En este episodio del podcast «Teoría en Movimiento», nos adentramos en la fisiología del ejercicio y el movimiento humano. Con la ayuda de Daniel Leite, Ana Ortiz y la Dra. Laura del Puerto, exploramos cómo el cuerpo humano se adapta y responde al entrenamiento físico, y cómo podemos aplicar este conocimiento para mejorar nuestro rendimiento y salud.

Regulación de los procesos metabólicos durante el entrenamiento

La comprensión de la biología celular y la anatomía del cuerpo nos sirve de base para entender cómo funciona desde el nivel más básico hasta el más complejo. Durante el entrenamiento, el cuerpo ajusta sus procesos metabólicos para satisfacer las demandas energéticas, aumentando la sensibilidad a la insulina y mejorando el metabolismo sistémico. 

Cambios en órganos y sistemas durante el entrenamiento

El entrenamiento físico induce cambios adaptativos en varios órganos y sistemas del cuerpo.
En el sistema cardiovascular mejora el rendimiento cardíaco y la circulación sanguínea, aumentando la eficiencia del transporte de oxígeno y nutrientes. En los músculos Incrementa la fuerza y la resistencia, mejorando la capacidad para realizar actividades físicas intensas. A nivel pulmonar aumenta la capacidad de los pulmones y la eficiencia respiratoria. Mientras que en el sistema nervioso mejora la coordinación y la respuesta neuromuscular.

La importancia del conocimiento de la fisiología humana

Comprender cómo funciona el cuerpo permite a los entrenadores saber qué hacer y qué no hacer para potenciar habilidades físicas y evitar lesiones. Es crucial entender primero cómo funcionan los órganos y sistemas en reposo antes de estudiar cómo el ejercicio los impacta y cómo se adaptan a las demandas del entrenamiento.

Diseño de sistemas de entrenamiento

Para esto, existen dos grandes sistemas de entrenamiento: para la Salud o la participación y para el Alto Rendimiento o la competencia.

El primero se enfoca en ejercitar el sistema cardiovascular, muscular, metabólico y respiratorio para mantenerlos en condiciones óptimas y prevenir enfermedades. El segundo se orienta a maximizar el rendimiento deportivo, adaptando los estímulos según la disciplina, ya sea resistencia, fuerza o velocidad.

Llevar la teoría a la práctica

Una forma efectiva de aplicar la teoría a la práctica es realizar pruebas de esfuerzo para evaluar cambios y adaptaciones fisiológicas. Estas pruebas pueden incluir la medición de la frecuencia cardíaca y la percepción subjetiva de esfuerzo, así como la medición de lactato para observar mejoras después de un período de entrenamiento.

Factores extra fisiológicos y el «Arte» del entrenamiento

El entrenamiento no es solo ciencia, sino también arte. Existen factores mentales, familiares, laborales y climáticos que pueden afectar el rendimiento deportivo, y el entrenador debe ajustar el plan de entrenamiento a la realidad del deportista, considerando sus necesidades individuales a modo de mejorar la performance física y evitar riesgos necesarios.

¡Te invitamos a escuchar un nuevo episodio del podcast de Enedif!

Comprender la fisiología del ejercicio es esencial para diseñar programas de entrenamiento efectivos y seguros. Este conocimiento permite adaptar los entrenamientos a las necesidades individuales, mejorando tanto el rendimiento deportivo como la salud general. En este episodio, Daniel Leite, Ana Ortiz y la Dra. Laura del Puerto ofrecen información valiosa sobre cómo llevar la teoría a la práctica en el entrenamiento deportivo.

Laura es docente en el área de Ciencias Biológicas de Enedif, donde trabaja en cómo aplicar la teoría al entrenamiento y al deporte.

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